Hiperbalada entre atlantes (La Rana, 2017) es un poema totalizante que aglutina lo barroco y lo prosaico, el lirismo y lo conceptual. A través de 61 cantos, su creador hace gala de una mixtura de registros que sitúan nuevamente a la poesía como una tensión del lenguaje en el que el hombre profundiza en su intelecto y su relación con el mundo, proponiendo un orden trasfigurado en que situar la experiencia de lo visible y lo posible. El lenguaje deviene entonces una nueva herramienta de conocimiento que, entre más matizado, más apuntala esos modos del pensamiento y la emoción que son acaso la esencia de lo humano.
Si el sueño de la poesía es crear un mundo autosuficiente formado de palabras, Arvizu Morales emprende esta tarea con afán titánico, para modelar, como a partir de un barro germinal, un monolito en el que cada palabra es un espejo. En ese juego de espejos, el sentido queda multiplicado potencialmente.
Entre la pléyade de escritores de su contexto, el autor rescata de la tradición (y la vanguardia también es tradición) los materiales que otros ya no frecuentan. Así van apareciendo modos escriturales de diversas épocas, nuevamente vigentes, que se edifican sobre campos semánticos que van de lo natural a lo artificial, de lo celestial a lo mundano, de lo interior a lo cósmico y de lo arcaico a lo contemporáneo. A partir de estas lecturas va tomando forma una epifanía acotada en lo simbólico, en las raíces mismas de los misterios de la razón, allí donde nos sorprenden las matemáticas del verbo y el ser poético es posible.
Esta obra se concentra en la visión desde el sitio arqueológico de Tula de la mexicanidad posmoderna. La obra fue escrita hace algún tiempo, pero del Fondo recibió el impulso necesario para ver la luz y ser promocionada. “Al ser mi primera obra publicada obviamente persiste una sensación de gozo, y además, me compromete a realizar obras con mayor calidad, buscando propuestas que dejen evidencia de evolución creativa”, nos cuenta el autor.
Esta obra, producto del Seminario para las Letras Guanajuatenses, viene a dar testimonio de la profesionalización de las configuraciones poéticas que los autores del estado asumen y defienden, y del interés de esta editorial por la creación literaria emergente del estado.