Antonio García Soto nació en 1944 en San Pedro de los Naranjos, Salvatierra, Guanajuato, México. En la actualidad reside en su pueblo natal. Su entrada a las letras es tardía: es en 1994 cuando su relato “La fiesta de la casita” gana el primer lugar en el VII concurso estatal “Una tradición de mi pueblo”, convocado por El Consejo Nacional de Fomento Educativo y el Instituto de Cultura del Estado de Guanajuato. En 2015 gana el primer lugar nacional del VII concurso: “Memorias del viejo y la mar”, organizado por la Secretaría de Marina Armada de México. El 21 de noviembre del 2019, La Red Estatal de Tertulias Literarias Guanajuato “José Luis Calderón Vela” hace un homenaje-reconocimiento a su trayectoria literaria. A la fecha ha publicado diez libros de temas variados: poesía, cuento, historia; y ahora su primera novela.
1.- ¿Cómo fueron sus inicios en la escritura y cómo surge esta vocación?
Soy maestro rural jubilado. En 1966 cuando, empecé a trabajar, se daba tal importancia a la educación cívica que continuamente tenía que conmemorar las fechas del calendario escolar y los honores a la bandera, lunes y días festivos obligatorios. El material poético a la Patria que traían los libros de texto y mis apuntes de la secundaria y normal se agotaron. Tuve que improvisar haciendo poemas de versos octosílabos a la manera tradicional e incipientes obras teatrales, así como cantos escolares. Conservé parte de ese material y en 1998 el gobierno municipal de Salvatierra me publicó el libro Niños rurales. Así nació mi vocación por escribir.
2.- ¿De qué trata su relato “La fiesta de la casita”?
Es un relato de la revuelta Cristera que me persiguió desde niño hasta 1994, cuando tuve la oportunidad de escribirlo para el VII concurso estatal “Una tradición de mi pueblo” obteniendo el primer lugar. Se trata del cura franciscano fray José Pérez Rojas oriundo de Coroneo y sacrificado el día 2 de junio de 1928 por el gobierno del general Plutarco Elías Calles, presidente de México en ese momento. Su fusilamiento fue en terrenos de la hacienda de Cacalote, municipio de Tarimoro. Digo que me persiguió porque mi abuela desde muy niño me platicaba la historia a su peculiar manera: compungida y con algunas lágrimas que no lograba disimular. El relato fue creciendo cuando ella me llevaba al templo de San Francisco en Salvatierra, el segundo sábado de cada mes, y me mostraba la urna que contenía los restos del sacerdote. Ya siendo maestro, trabajé dos años en las Cañadas de Tirado, donde conocí el lugar exacto denominado “El Cajón” donde fue aprendido el religioso el día 31 de mayo de 1928, llevándolo ese mismo día a Salvatierra, y al día siguiente enviándolo por tren a Celaya para ser juzgado. Como el general Calles no quería expedientes sino hechos… el 2 de junio lo trasladaron en automóvil y de madrugada a terrenos de la hacienda de Cacalote, donde lo fusilaron al pie de un frondoso mezquite del cual quedó solamente un socavón… La gente hasta la tierra se llevó como reliquia.
En 1984 llegué a trabajar al ejido de La Noria de Gallegos, cuyas tierras habían sido de la hacienda de Cacalote; ahí para 1994 pude completar la historia porque conocí a personas mayores que me contaron lo sucedido al padre en ese lugar.
3.- ¿Cuál es el título del cuento con el que participó en el VII Concurso “Memorias del viejo y la mar” y de qué trata?
El título de este relato es “La concha”.
Para quienes vivimos tierra adentro, hablar del mar, sus litorales, puertos y hermosas playas, es difícil porque desconocemos el argot de los marineros y de los pueblos costeros. Con la intención de participar en dicho concurso, tuve que leer bastante sobre el tema; entre otros libros, leí la enorme novela de Arturo Pérez Reverte La carta esférica, La perla de John Steinbeck. Asimismo, Cuentos del mar y la tierra de Salvador Vives Berdón y Dormir en tierra de José Revueltas. Di muchas vueltas al tema y concluí que sería mejor hablar con la verdad, puesto que no conozco el mar. Basé mi relato en las pláticas de un tío que se fue a la Ciudad de México y finalmente se estableció en Champotón, Campeche en el ejido Moquel. Cuando venía de visita platicaba cosas de por allá que llamaron mi atención; las combiné con sucesos nuestros y el resultado fue un cuento amoroso, aunque triste. El tío trajo a una niña con él, hija de su mujer. El niño del cuento se enamora de ella e intercambian regalos: él recibe una concha marina y ella una resortera. Con esos objetos viven esperanzados en volver a verse, pero ella muere y el niño, convertido en anciano, termina contando la historia a su nieto con esta frase: “En esta concha, hijo, escucho el rumor de las olas y los pasos de Francisca cada vez más cercanos”.
4.- ¿Cuál es la relación de títulos y fechas de los diez libros que ha publicado?
Los Pebecos, anecdotario, 1993
Estudio de la comunidad de La Noria, monografía, 1995
Murió en la carcajada, cuentos, 1996
Niños rurales, poemas infantiles, 1998
San Pedro de los Naranjos en el valle de Guatzindeo, monografía, 2000
Rondas y cantos en cuentos, literatura infantil, 2004
Europa monumental, crónica, 2006
El Gorgojo, sátira ecúmene, 2015
Cantares de Guatzindeo, poemario, 2015
Vivencias y recuerdos, añoranzas, 2019
5.- ¿Cuáles son los temas históricos a los que se dedica en sus textos?
Me interesan los temas del origen, evolución, desarrollo y conflictos históricos; tenencia de la tierra… Todo lo relacionado a los seres humanos que han vivido en esta región desde tiempos inmemoriales.
6.- ¿Cómo es su relación con la poesía?
Mi relación con la poesía es íntima, amena y de respeto. Íntima porque solo en la intimidad se aprecia y valora la calidad de este arte que, utilizando solamente palabras, pueda pintar en la mente diáfanas imágenes y fuertes emociones; amena porque se disfruta igual su creación como su lectura. De respeto porque es indiferente al ser humano; y aunque muchos la buscan son pocos los que logran encontrarla.
7.- ¿Cómo ha sido el proceso creativo de su primera novela?
Como maestro que soy y, músico por vocación, en mi juventud combinaba mi trabajo con la música para incrementar mis raquíticos ingresos. Conocí a varios grupos famosos en las audiciones cuando con mi grupo alternaba con ellos. Hubo un momento en que estuve tan involucrado en el ambiente grupero, que pensé en abandonar mi trabajo docente para dedicarme a la farándula. Finalmente, conociendo el desgaste físico y mental de las desveladas, el riesgo de perder la vida en cada tocada, las drogas y conflictos en ese ambiente, preferí mi trabajo porque era algo seguro y además me gustaba.
Me quedaron, sin embargo, recuerdos suficientes para dar forma a una novela del gremio grupero.
8.- ¿Tiene alguna fecha tentativa para la aparición de su primera novela ya publicada?
No, no tengo ninguna fecha. Lo haré en cuanto me entreguen la primera edición.
9.- ¿Cómo visualiza el panorama literario de su municipio, Salvatierra?
Casi invisible; no por falta de talentos, sino por la pandemia y en cierta forma la delincuencia. Tengo fe que esto mejore para que salgan a la luz las obras literarias de mis paisanos que están escribiendo en el anonimato.
10.- ¿Cómo ha sido su experiencia como parte de la Red de Tertulias Literarias Guanajuato?
En la RTLG, mi experiencia ha sido satisfactoria porque antes de iniciar el proyecto el profesor José Luis Calderón Vela, a quien conocí desde los años ochenta, me invitó a participar.
No pude hacerlo directamente por cuestiones de salud. Aun así, el maestro José Luis e Ismael Zamora, coordinador en Salvatierra, me invitaron para ser el primer escritor homenajeado en vida en el estado por la RTLG. Acepté, no por merecerlo, sino para no parecer soberbio; además, la idea de conjuntar artistas literarios y plásticos, incipientes y avanzados en un solo grupo de puertas abiertas, me pareció una excelente propuesta.
11.- ¿Cómo es su relación con otros escritores del estado?
Conozco a los escritores más destacados del estado y parte de su obra. Algunos son mis amigos y me han ayudado en forma espontanea y desinteresada, como es el caso de Juan Manuel Ramírez Palomares, a quien agradezco su intervención para la publicación del libro de poemas infantiles Rondas y cantos en cuentos y el haberme incluido en su libro Hora sin tiempo. Conozco a otros que, como yo, navegamos en este mar de las letras. En todos he visto camaradería y voluntad de mutua ayuda.
12.- ¿De dónde surge la idea de su novela y por qué el tema de los músicos gruperos y el rocanrol de mediados del siglo pasado?
La idea surge de la necesidad de contar algunas experiencias que tuve como músico durante unos diez años, y al destino que me haya dado la juventud y fortaleza en la época dorada del rocanrol mexicano. Bueno, también la herencia musical de familia.
13.- ¿Cómo es su relación con la lectura?
Excelente, indispensable y continua. La lectura es para mí un medio para viajar con la imaginación, conocer el pensamiento de otras mentes, tener al alcance la información de las múltiples actividades humanas desde tiempos muy remotos.
14.- ¿Qué está leyendo actualmente?
Estoy leyendo la novela Ilusiones perdidas de Honorato de Balzac.
15.- ¿Tiene hábitos, tiempos, lugares particulares a la hora de escribir?
Normalmente, debido a mi vista cansada, lo hago por la mañana aprovechando la luz solar. Mi lugar preferido es mi pequeña biblioteca porque tengo lo necesario a la mano.
16.- ¿Tiene hábitos, tiempos, lugares particulares a la hora de leer?
Sí, tengo una salita donde por las tardes leo para relajarme. En otras ocasiones, cuando el clima lo permite, salgo fuera de la casa y me siento en una sillita de tule bajo la sombra de un generoso aguacatero donde consumo la tarde.
17.- ¿Cuál es su idea personal del cuento?
El cuento es un relato y, un relato es un cuento que tiene un principio, un nudo y un final. Hay en este género una infinidad de posibilidades creativas, formativas, informativas y recreativas. El resorte del cuento es la anécdota y las experiencias vividas o imaginarias que al escribirlas adquieren identidad propia, quedando totalmente independizadas de su origen. El escritor tiene una enorme responsabilidad al escribir un cuento, sobre todo debe ser honesto consigo mismo, evitando los trucos mercantilistas de las emociones humanas que explotan con pericia los escritores ladinos y casas editoriales para ganar fama y dinero.
18.- ¿Cuáles son sus autores favoritos?
José Saramago, José Emilio Pacheco, Ayn Rand, José Revueltas, Ermilo Abreu Gómez, Fernando del Paso, Oscar de la Borbolla, Gary Gennings, José Luis Borges, Miguel de Cervantes, Vicente Huidobro, Álvaro Mutis, Patrick Süskind, Carlos Fuentes, Juan Manuel Ramírez Palomares, Manuel González Prada, Jorge Edwards, Charles Baudelaire, B. Traven… Entre otros.
19.- ¿Cuáles son los libros que le han sido más entrañables y significativos en su vida?
La biblia, Don Quijote de la Mancha, El periquillo sarniento, Caneck, Historia verdadera de la conquista de la Nueva España, Historia general de las cosas de la Nueva España, El origen de las especies, Historia del tiempo, Visión de los vencidos, Francisco Tenamaztle… Entre otros.
20.- ¿Qué es lo más valioso y trascendental que le ha dado la literatura a su vida?
Conocimiento, libertad, placer y comunicación con las mentes brillantes del pasado, presente y posiblemente del futuro.
Antonio G. Soto